VILLANCICOS NAVIDEÑOS
Cercana la Nochebuena y antes de
que los centros cierren por vacaciones, los alumnos afinan sus voces y se realizan los últimos ensayos de las
canciones con las que van a participar en los ya más que tradicionales concursos y festivales de villancicos navideños. Los
nervios afloran y siempre hay percances de última hora: un despistado que se
equivoca de letra, otro que se va del tono e incluso algún que otro gallo. Pero
nada de todo esto importa demasiado porque al fin y al cabo lo que cuenta es que un año más al ser
cantados los villancicos cumplirán sobradamente
con su función de acercarnos más a Dios en estas fechas.
Y es que hay que reconocer que la
música y las letras de los villancicos elevan nuestro espíritu, crean un ambiente propicio para la Navidad y
están prácticamente presente en todos los lugares donde vamos durante estos días. Pero sobre todo cumplen su
cometido al hablarnos del nacimiento de Jesús y fomentando la participación de los asistentes
en las liturgias de Adviento y de Navidad.
Y lo que está más que claro es que sería algo muy
extraño que alguien pase estas fiestas sin al menos tararear alguno de los
villancicos más populares.
Por todo esto, para los más curiosos os dejo un enlace que
nos explica cuál es el origen de los villancicos y para los que deseéis deleitaros
con ellos e incluso a atreveros a cantar un video recopilatorio de los más
conocidos.
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