Hoy hace justo una semana que se celebró la edición 2017 de
la Maratón de Valencia a la que llevo asistiendo como espectadora desde hace
años y puedo deciros que es un evento que se prepara con sumo cuidado en todos
los sentidos. Llegado el gran día es muy fácil apreciar como por un lado la organización
y por otro los corredores hay trabajado y entrenado duro durante todo el año
para el magnífico acontecimiento. Realmente se nota el esfuerzo y empeño por
parte de todos tanto, que este año al batirse el record de tiempo, la Maratón
de Valencia ya es considerada la mejor y más rápida de España. Si el 19 se
realizó la competición el siguiente día 20 volvían a abrirse las inscripciones
para el próximo año, vuelta a empezar para la organización y los asistentes,
estoy segura de que con más empeño e ilusión.
Y si os cuento todo esto es porque me ha hecho recordar que el
YOUCAT, el libro de catequesis para jóvenes de 15 a 20 años, comienza con la
Maratón hacia la confirmación. Nos cuenta que al igual que es imposible llegar
en óptimas condiciones al día de la carrera si no nos hemos entrenado previamente
para ese día, tampoco se puede pretender llegar a uno de los acontecimientos
más importantes de nuestra existencia terrena como es el sacramento de la
confirmación sin haberse preparado a conciencia.
Y no solo en la Confirmación, toda nuestra vida cristiana es
una carrera de Maratón por la cual vamos avanzando. Hay que intentar por tanto ejercitarnos y recorrerla con amor, voluntad
y servicio. No estará exenta de
esfuerzos pero clara es la recompensa de nuestra meta que es Dios. Él lo ha
organizado y lo ha dispuesto todo para que logremos llegar al final de nuestra
vida batiendo nuestra mejor marca, es allí donde Dios nos espera, para que
cuando aquí terminemos, inmediatamente empecemos de nuevo pero esta vez una
nueva y definitiva vida futura junto al Padre.
¿Estás preparado? ¡Pues vamos allá!…en 5-4-3-2-1...adelante!
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